Qué es el gobierno de datos (y por qué es importante)
El gobierno de datos abarca las políticas, las estrategias y los procesos que garantizan la precisión, la protección y la utilización estratégica de los datos de una empresa. Con la expansión de las empresas en ecosistemas cloud, la adopción de capacidades de IA/ML y un mayor escrutinio reglamentario, un buen gobierno de datos ha pasado de ser un requisito de cumplimiento normativo estándar a un acelerador empresarial de importancia crítica.
De hecho, un gobierno de datos deficiente puede tener graves consecuencias:
Activos de datos fragmentados: los silos de datos y las tareas duplicadas generan ineficiencias y confusión operativa.
Riesgos reglamentarios y de cumplimiento normativo: el incumplimiento de reglamentos como el RGPD y la CCPA puede conllevar sanciones cuantiosas y daños a la reputación.
Insights de negocio inexactos: los datos no fiables comprometen los informes, los analytics y la toma de decisiones estratégicas.
Vulnerabilidades de seguridad: un gobierno inadecuado aumenta el riesgo de filtraciones de datos y acceso no autorizado.
Reducción de la confianza del cliente: una mala gestión de los datos personales y confidenciales puede erosionar la fidelidad hacia la marca y la confianza en ella.
Para mitigar estos retos y gestionar la complejidad de los entornos de datos actuales, dos cosas son imprescindibles: un marco claro y una solución de software fiable.
Elementos clave de un buen marco de gobierno de datos
Un marco sólido es el pilar de cualquier programa de gobierno de datos eficaz. Une a personas, procesos y tecnología en torno a una misma noción de cómo se definen y se utilizan los datos, cómo se accede a ellos y por qué son importantes.
Al establecer estándares claros, fijar objetivos de negocio y alinear a las partes interesadas, el marco transforma el gobierno: de conjunto de reglas a facilitador estratégico de valor empresarial.
Fundamentos del programa de gobierno de datos
Un programa de gobierno claro comienza con el establecimiento de objetivos estratégicos que se alineen con objetivos empresariales más amplios. Al incluir el gobierno de datos en la planificación estratégica general, se fomenta una mayor coherencia y supervisión.
Los responsables de los datos deben definir el éxito para su empresa en términos de gobierno. Podría definirse como una mejor calidad de los datos, un cumplimiento normativo más ágil o unos analytics de datos mejorados.
La participación multifuncional de administradores de datos, propietarios, líderes de TI y partes interesadas de la empresa es fundamental para impulsar un compromiso continuado.
Políticas, estándares y cumplimiento normativo
Las políticas de gobierno establecen expectativas claras sobre cómo deben usarse, protegerse y mantenerse los datos. Definen reglas sobre la calidad, la seguridad y la privacidad de los datos, a la vez que respaldan el cumplimiento normativo de reglamentos clave como el RGPD, la HIPAA y la CCPA.
Un gobierno sólido garantiza que, además de cumplirse, estas normas sean lo suficientemente flexibles para evolucionar conforme a los requisitos legales y las prioridades empresariales cambiantes.
Otros componentes fundamentales
Además de las políticas y la estructura, un buen marco de gobierno de datos depende de un conjunto de componentes fundamentales que garantizan que los datos sean precisos y accesibles. Entre esos componentes están los siguientes:
Gestión de la calidad de los datos: establece procesos para medir, supervisar y mejorar la precisión, integridad y puntualidad de los datos.
Gestión y catalogación de metadatos: crea un inventario central de activos de datos que promueve el descubrimiento, la comprensión y el uso.
Trazabilidad de los datos: documenta el paso de los datos por los sistemas, para mejorar la transparencia, facilitar la resolución de problemas y garantizar la adjudicación de responsabilidades.
Gestión de datos maestros (MDM): consolida las entidades de actividad principal y los catálogos de datos para establecer una sola fuente de información.
En conjunto, estos componentes constituyen el motor operativo de gobierno: proporcionan una estructura, reducen riesgos y garantizan que los datos aporten valor significativo en toda la empresa.
Cómo implementar el gobierno de datos
La implementación de un software de gobierno de datos no es solo una implementación técnica, es también una transformación empresarial.
Una buena implementación empieza con un roadmap claro y un compromiso con una ejecución disciplinada. Cada paso debe conducir hacia una cultura sostenible en todo el ámbito empresarial, basada en datos fiables y bien gestionados. Este es el enfoque que hace falta:
1. Defina primero su estrategia de gobierno de datos
Comience por establecer una estrategia clara e interactiva, que esté directamente relacionada con los objetivos de su empresa. Defina en qué consiste el éxito: ¿en una mejor toma de decisiones, en la reducción de los riesgos, en una innovación más rápida? Obtenga el respaldo de la alta dirección desde el principio para asegurar la alineación, los recursos y el compromiso a largo plazo. Recuerde que la tecnología sigue a la estrategia (y no al revés).
2. Audite su entorno de datos actual
Antes de implementar cualquier proceso de gobierno de datos, realice un inventario completo de su entorno de datos actual. Planifique sus sistemas, identifique carencias y evalúe los riesgos de seguridad de los datos (por ejemplo, bases de datos redundantes o metadatos incoherentes). Priorice los problemas que es necesario resolver primero, para evitar aplicar herramientas de gobierno de datos nuevas a problemas antiguos. Utilice la auditoría para crear un referente con el que medir el progreso.
3. Establezca el marco de gobierno
Asigne desde el principio responsabilidades y roles claros. Designe propietarios y administradores de datos, y establezca un comité de gobierno de datos para orientar la estrategia y resolver conflictos. Documente los estatutos de cada rol y defina resultados que permitan medir el éxito. Los equipos de gobierno fuertes convierten las políticas en una práctica diaria y ayudan a impulsar un cambio cultural perdurable.
4. Seleccione el software de gobierno de datos adecuado
Al evaluar plataformas, céntrese en sus características imprescindibles: integración perfecta, escalabilidad, seguridad y soporte sólido. Priorice las soluciones que se alineen con su arquitectura futura y que puedan evolucionar con sus necesidades. Siempre que sea posible, pruebe el software en un escenario real con un solo dominio o departamento, para validar el rendimiento antes de una implementación más amplia.
5. Empiece poco a poco y vaya escalando
Resista la tentación de abordar todo a la vez. Centre su primera implementación de gobierno de datos en un dominio de alto valor (por ejemplo, finanzas, RRHH o datos de cliente ) que pueda generar resultados rápidos. Utilice estos primeros éxitos para dar impulso, crear promotores internos y precisar su enfoque antes de expandirse a otras áreas del la empresa.
6. Supervise, mida y mejore
El gobierno de datos sigue siendo esencial tras el lanzamiento. Defina indicadores clave de rendimiento (KPI), como mejoras en la calidad de los datos, tasas de adopción y reducción de riesgos de cumplimiento normativo. Establezca controles periódicos del estado del gobierno a cargo de los gestores de datos, revisiones a cargo de las partes interesadas y planes de mejora continua. Los programas más sólidos se adaptan a las necesidades empresariales, las tecnologías y las regulaciones cambiantes a lo largo del tiempo.